La gente no se compromete con el trabajo…
“La gente no se compromete con el trabajo”.
Para todas las líderes, dueñas de negocio, directoras, jefas, éste es UN TEMA.
“Parece que soy niñera de adultos” me dijo algún día una de mis clientes frustrada por el desgaste que sentía de no encontrar a las personas adecuadas para apoyarla en su negocio.
¿Alguien más así?
Esto suele ser uno de los temas que tocamos en las Llamadas de Comunidad que tengo con las mujeres directoras, CEO’s, dueñas de negocio, altas ejecutivas que son parte de mis programas de #RisingChangemakers y por eso decidí tocarlo en mi mensaje de la semana.
(Aclaro, no todas las #RisingChangemakers tienen los mismos roles, trabajos, perfiles).
Aquí, además de la frustración y el desgaste que puede ser “lidiar con gente”, vienen los típicos cuestionamientos: “seguro soy yo, yo estoy haciendo algo mal, soy mala jefa, mala líder” y de ahí pendulamos al otro lado: “son los otros”… “son ellos”, “no son responsables”, “es que los “millennials” y las nuevas generaciones” (aunque muchas de nosotras somos millenials 😂), “es que ellos quieren todo “fácil", “nadie quiere trabajar”.
Y si encima has estado cultivando la filosofía de “simplificar”, “menos desgaste”, “menos esfuerzo”, “menos sacrificio” aún peor, porque entonces si “ellos” quieren“todo fácil”, “¿será que yo estoy mal?, ¿será que estoy pidiendo demasiado? ¿será que soy “explotadora?”...
¿No se supone que sí deberíamos querer fácil y fluir y hacerlo más fácil y trabajar menos y disfrutar más?
Sistémicamente en los modelos de trabajo hay muchas cosas cambiando y que necesitan transformarse desde la raíz.
¿Qué sé hoy?
Yo tengo un equipo que ha ido cambiando y creciendo a lo largo del tiempo. Justo en esta etapa estoy en esa transición de reacomodar, de buscar apoyo diferente y de alto nivel, de desarrollarme yo y apoyar a que mi equipo se desarrolle aún más.
Por años dudé de mis capacidades de liderazgo porque me consideraba “muy exigente”, “muy impaciente”, “muy desordenada”, “con un cerebro muy complicado”,terminaba haciendo las cosas yo porque no creía ni sentía que nadie más podía entender lo que necesitaba o las podía hacer como yo (y sí, soltar para mí es un reto todavía porque claramente no, nadie piensa como yo, ni ve lo que yo veo, porque yo soy yo y otros son otros y el chiste es dejar que los otros sean quienes son 🙌).
Mi negocio me fue empujando a atreverme a cada vez tener más equipo y enfrentar esos miedos. Créeme, más que el miedo a contratar gente por temas de dinero, mi principal inseguridad era por si de verdad iba a ser pésima jefa y me iban a odiar y nadie iba a querer trabajar conmigo sumado al hecho de que también traía la historia que había escuchado cientos de veces de “trabajar con gente es super difícil”, “no se comprometen con el trabajo”, “la gente va y viene y pierdes mucho tiempo capacitando para nada”, etc. etc.
Adelantémonos en el tiempo. Hoy veo cómo mi camino ha sido el del liderazgo y el de acompañar a otras mujeres líderes. Hay muchas cosas que no sé pero lo que sí sé a ciencia cierta es lo siguiente:
👉 No, la gente no se compromete con el trabajo, se compromete con LA VISIÓN si es que esa visión es resonante para ellos.
👉 Se compromete con una visión de “mejor” con lo que es importante para ellos y con una visión de “mejor” para sí mismos.
👉 Las visiones mueven y “comprometen” siempre y cuando toquen el corazón, te den y no te quiten.
👉 A una líder desgastada se le refleja un equipo desgastado.
👉 Si los objetivos y el “trabajo” son de la cabeza, la energía no estará ahí. Si en lugar de objetivos hay VISIÓN que se siente en el corazón, habrá compromiso, devoción, sueños y, por lo tanto, ENERGÍA Y FUERZA VITAL.
👉 A mayor la visión, mayor la fuerza vital y la energía y poder de creación de la líder y del equipo, quienes por cierto también comienzan a encarnar aún más su liderazgo, hacia adentro y hacia afuera.
👉 Una GRAN VISIÓN requiere de potencial de impacto en el mundo, en la vida de otros y en MI PROPIA VIDA.
ESE PARA MÍ ES EL REQUISITO DEL LIDERAZGO DE CORAZÓN.
¿Qué requiere?
💥 Menos cabeza, más corazón.
💥 Más aliados, menos “empleados”.
💥 Menos “disciplina” y “reglas”, más devoción.
💥 Menos “trabajo”, más VIDA.
¿Cómo llegar a eso?
A través del cuerpo.
PROTEGIENDO TU FUERZA VITAL, SINTIENDO Y CREANDO DESDE AHÍ LO NUEVO.
¿Mi camino de liderazgo y visión? EMBODIMENT (encarnarte y sentir en todos tus cuerpos) (y también es mi camino de confianza, libertad, creatividad y más 😉).
Mi llamado, mi visión y mi trabajo: acompañar a muchas otras mujeres líderes en esta reconexión, resensibilización y reclamación de SUS CUERPOS, SU ENERGÍA, SU CORAZÓN, SU VISIÓN, SUS SUEÑOS, SU VIDA.
He ahí mi mensaje del día para quien lo necesite.
Vale la pena profundizar en ello 😉.
Con #fiercelove❤️🔥,
