La mujer “chingona”, como decimos en México, es la mujer que se ve mega exitosa desde afuera, LA MEJOR en muchas cosas, la que sobresale, la que no falla, no decepciona, la que parece ser muy brillante y carga cientos de expectativas, principalmente las de ella misma, porque se pone la vara muy alta SIEMPRE.

Le da energía recibir el reconocimiento y admiración de otros y nunca le parece suficiente (y secretamente nunca piensa que lo hace suficientemente bien).

¿Te suena?

Sí, bajo este hechizo, la gente te admira, busca tu opinión, busca tu aprobación, much@s te envidian y aunque probablemente ya quisieras tirar la toalla, hacer algo diferente, descansar, disfrutar..., ya no te atreves porque se espera mucho de ti.

NO SER LA MEJOR SE SIENTE HORRIBLE 😞. 

Te comparas, compites aunque no quieras hacerlo y, hagas lo que hagas, siempre te queda la sensación de “pudo haber estado mejor”.

Ok, se te activó todo, lo sé, así que toma un par de respiraciones y acuérdate que no hay nada mal contigo.

Aquí viene la mejor parte, el antídoto y la medicina real que tú traes al mundo (más allá de tu “chingonería” 😂):

El hechizo pesa y siempre tiene repercusiones en nuestra vida. En tu caso el hechizo se está robando principalmente tu capacidad de DISFRUTAR. Sí, te dan el puesto, consigues el mega cliente, llegas al resultado y al objetivo, tienes la casa, la familia, los hijos o lo que sea que sean tus “metas” y NO LAS PUEDES SENTIR, no puedes conectar con tu gozo, con tu satisfacción ni con tu plenitud. Aunque parece que lo tienes todo, no se siente así. Probablemente, tu hechizo de “LA MUJER CHINGONA” te está robando también tu capacidad de DESCANSAR, desconectarte y simplemente SER y ESTAR. 

Pero te recuerdo que el hechizo es sólo una máscara ocultando tu magia y TU ESENCIA AUTÉNTICA y yo no soy una Coach que se obsesiona con “resolver los problemas” de las personas, yo pongo el foco en tu potencial y en el ORO que hay dentro de ti,  ese oro es el  ALTER-EGO de tu HECHIZO.